En la Universidad Tecnológica de Eindhoven se lo deben estar pasando bomba. En este artículo explican como analizan los datos de sensores de humedad, temperatura, luz, clorofila, … para mejorar la cantidad y calidad de las cosechas de patatas.
Aplicando un modelo matemático que opera con variables como distancia entre matas, intensidades de riego, dosis de abono, etc. son capaces de obtener las mejores combinaciones de esas variables para maximizar la productividad de las tierras y calidad de las cosechas.
Otra combinación de nuevas y viejas tecnologías. Ya vimos algo parecido en el IoT, Internet of Tomatoes.